El partido de Pablo Iglesias no está dispuesto, no ya sólo a que España mantenga la moratoria sobre las nucleares en suelo nacional (aunque de momento no hay problema con comprarle energía producida por nucleares a Francia), sino tampoco a contribuir desde aquí a la producción de dicha energía en terceros países.
Bajo esta premisa, UP ha llevado a cabo una iniciativa para prohibir la investigación y el aprovechamiento de minerales radiactivos (definidos en la Ley 25/1964 de 29 de abril) en España.
El pacto ha sido firmado también por el PSOE, cuyo historial de lucha contra la energía nuclear es conocido.
El acuerdo pone contra la pared proyectos de extracción de uranio en yacimientos españoles como el que hay en Retortillo (Salamanca).
La empresa australiana Berkeley tiene desde hace más de una década un proyecto minero para el municipio de Retortillo, en la provincia de Salamanca. Tras años de problemas con los partidos políticos españoles a la izquierda del PP, que sí les ha sido favorable, la moratoria anti nuclear etc… el proyecto no ha terminado de salir adelante.
La minera contaba en 2014 con el apoyo del ayuntamiento de Retortillo y la Junta de Castilla y León y había elaborado un plan ecológico y de sostenibilidad.
Este acuerdo podría suponer la cancelación definitiva.