Este lunes comenzaba la huelga de transportistas que por culpa del altísimo precio del gasoil llevan semanas trabajando a pérdidas
A pesar de que el Gobierno ha intentado minimizar lo máximo posible la envergadura e importancia de la huelga insistiendo en que ha convocada por una asociación minoritaria, la realidad es que la plataforma convocante no recibe subvenciones y se financia con las aportaciones de sus socios que comprenden cerca del 90% del sector del transporte por carretera y están formados por autónomos del sector, pequeñas y medianas empresas.
Los efectos ya han empezado a percibirse y es que empiezan a faltar alimentos de primera necesidad tales como la leche o la harina en los supermercados
El Ejecutivo se está dedicando a criticar a los convocantes y vincularlos a movimientos de «extrema derecha» sin tener prueba alguna, algo que ha reconocido la misma ministra de Transportes este jueves para seguidamente acusar a la extrema derecha de estar detrás de todo nuevamente.
Los responsables gubernamentales con competencias en este tema han advertido de que el Gobierno empleará todo el peso de la Ley para evitar los piquetes
DESPENALIZACIÓN DE LOS PIQUETES
Cabe recordar que PSOE y Podemos han sido firmes defensores de los piquetes e incluso los han alentado cuando el objetivo de las protestas era un gobierno del PP.
De hecho fueron ellos quienes en abril del año pasado derogaron la Ley que penalizaba con hasta 3 años de prisión la acción violenta de los piquetes.
Incluso aprovecharon para incluir en el texto legal unas palabras cargando contra el PP:
«Con la crisis como oportunidad, desde la llegada del Gobierno del Partido Popular en diciembre de 2011, se inició un proceso constante y sistemático de desmantelamiento de libertades y especialmente de aquellas que afectan a la manifestación pública del desacuerdo con las políticas económicas del Gobierno».
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