La conjura para destruir España | Parte II

Ley de inmersión lingüística o la eliminación del español
Mientras la mafia de los “Puyol-one” robaba, también pactaba con los sucesivos gobiernos de España, haciendo estos la vista gorda ante sus latrocinios y delitos, en muchos casos tan descarados que producía la náusea y el asco más repugnante. Pero los gobiernos, con tal de recibir el apoyo de este presunto criminal, pactaban con él para conseguir esos gobiernos que estaban en minoría. Así fue consiguiendo, por una parte, miles de millones, tanto para enriquecerse personalmente (se estima en más de 3.000 millones de € robados por la familia mafiosa de los “Puyol-one”), así como para sufragar los gastos de su planificación para la secesión de España, por otras políticas que iban desbancando a las nacionales, como su ley estrella, la ley de inmersión lingüística.
Una ley que impusieron a fuego a toda la comunidad escolar, para más tarde a la rotulación en exclusiva en catalán en todos los comercios y escaparates, en todos los lugares públicos y privados. A todo el mundo se le exigió el cumplimiento de esa ley y quien no la cumplía era multado con fuertes sumas de dinero.
La estelada
Toda supuesta nación debe de tener una bandera, en este caso es un invento sacado de las entrañas falaces y repugnantes de una historia falsaria e inventada con el propósito de crear un relato creíble y tapar con ello la verdadera historia de la españolidad de Cataluña. Forjada a través de los siglos, pero tergiversada mil veces por esta jauría de independentistas, cuyo padre político, Jordi Puyol Soley, aún no ha pagado los 35 años de latrocinios, abusos de poder, nepotismo, despotismo y corrupción generalizada.
Es más, se atrevió a declarar ante la opinión pública que jamás había declarado ante la hacienda española y ante ninguna agencia tributaria ni un céntimo y se quedó tan ancho. Sin embargo, nadie se atreve a mover un dedo contra este capo mafioso que trajo todo el veneno secesionista sobre Cataluña.
Se atrevió incluso a amenazar en el parlamento de la generalidad con estas palabras:
“Si vas segando una parte de una rama, al final cae toda la rama y los nidos que hay en ella, y después caen todas las demás ramas”.
Imponiendo una inmersión lingüística al estilo naci, donde se ha ido eliminando el español de todas las materias, tanto de las escuelas, institutos y universidades, dando como resultado que después de varias décadas aquellos niños inocentes, después chavales de instituto para más tarde ser universitarios, se han educado a sangre y fuego con el relato creado ad hoc para lograr un día esa independencia tan ansiada, aunque fuere a costa de un enfrentamiento entre hermanos, una guerra civil incruenta para imponer sus veleidades secesionistas y extirpar de Cataluña todo vestigio de españolidad.
La planificación
Las tres premisas fundamentales de los enemigos de la nación española para su desintegración son:
La primera, es el idioma. Ingentes cantidades de dinero para imponer como lengua materna los idiomas regionales, anteponiéndolos incluso a idiomas universales como el inglés y anulando el idioma común y materno, el castellano. Esto lleva pasando años en Cataluña, Vascongadas, Galicia, C. Valenciana, Baleares y Navarra, con unos y con otros. Con el PP en Galicia, con los nacionalistas vascos en vascongadas y Navarra, con los socialistas-separatistas en Baleares, en Valencia y con los secesionistas en Cataluña.
Controlas la lengua, acentúas la supuesta «identidad nacional» y priorizas el idioma regional a los demás. En este tema, Jordi Puyol creo la ley de inmersión lingüística, herramienta fundamental para conseguir dicho fin, como así se ha demostrado a lo largo de los 35 años desde su aprobación.
La segunda, es la educación
La inmersión lingüística brutal y un adoctrinamiento durante décadas, así como una tergiversación de la historia reescribiéndola en los libros de historia de esas comunidades, han creado una miseria intelectual y moral en los ciudadanos que incluso se les ha hecho creer que la historia que les han contado fue verídica, nada más lejos de la realidad: una nauseabunda patraña de una Cataluña que jamás existió. O como diría aquel memorable y valiente Mozo de Escuadra, “la república no existe, idiota”.
Por último, es el control absoluto de los medios de comunicación. TV públicas regadas con miles de millones de dinero público al servicio de las causas independentistas-secesionistas
Todos los días mintiendo y adoctrinando en unas ideas idílicas sobre unas «naciones» que al escindirse de la «vieja y corrupta» España serían la vanguardia del mundo. No tendrían paro, ni miserias, ni corrupción, ni monarquías obsoletas y caducas. Todo sería maravilloso e idílico.
Y podría añadir la cuarta estrategia de los enemigos, creada a partir de los anteriores
La violencia en las calles engendrada y diseñada para crear el caos y enfrentarse a los C.Y F.S.E., los CDR en Cataluña, la Kale Borroka en Vascongadas y en general los grupos antifas, o la llamada izquierda Castellana, una banda de criminales que cada vez que reciben instrucciones de sus jefes políticos, presuntamente Podemos, salen a quemar Madrid. Es la podemización o comunistización de una parte de la juventud española, entrenados para la guerrilla urbana. Lo estamos viendo estos días como salen estos criminales a violentar las calles y sembrar el caos, destrozándolo todo e incendiando contenedores. Y lo más grave de todo, intentando asesinar a algún Mozo de Escuadra en Cataluña o Policía Nacional en Madrid, alentados por una parte del gobierno, que parece que se enfrenta con la otra parte que disimula y mira para otro lado.
Y luego están los jueces y fiscales que sirven al gobierno de turno, que se encargan de archivar las denuncias o condenar muy livianamente a todos estos personajes, cometiendo presuntos delitos de prevaricación y otros
Para luego sacarlos de la cárcel en pocos meses. Esta es la situación y el panorama actual de la disgregación de España, que como hemos comprobado en las últimas elecciones en Cataluña, esas estrategias están llegando al fin de su planificación, impidiendo a un partido democrático difundir sus ideas para que los ciudadanos catalanes conocieran el programa de Vox.
Ha sido imposible, en todos los actos de este partido democrático, que defiende la unidad de España, el libre mercado, el liberalismo económico, la UE (sin corrupción ni “chiringuitos”) acabar con todos los “chiringuitos” de la extrema izquierda, con los 17 “Reinos de Taifas”, que asfixian la economía, defiende la bajada de impuestos, acabar con las leyes anticonstitucionales de género, la igualdad real entre hombres y mujeres, despolitizar de una vez por todas la judicatura y que la justicia sea independiente etc. Pero, ante todo, es un partido que quiere regenerar la política en España, acabar con la corrupción y defender la libertad hasta las últimas consecuencias. Vox es el enemigo a batir, por ello se les ha agredido con todo tipo de objetos contundentes por unas hordas terroristas callejeras de extrema izquierda y muy violentas, alentadas por una parte del gobierno comunista, o por su totalidad, al menos no ha habido voces discordantes, pero que se le ha impedido ejercer la libertad a un partido políticos con 52 diputados naciones, siendo la tercera fuerza política de España.
En cualquier país moderno ya hace tiempo que soltaron amarras con esos viejos idearios anquilosados en el tiempo y que fueron tremendamente perjudiciales, nocivos y criminales para aquel viejo mundo con estructuras de poder fáctico o nada democráticas. Fue precisamente cuando las democracias irrumpieron en esos países, estos se desprendieron de aquellas ideologías sectarias y asesinas, como el nacismo, el fascismo o el comunismo. Sin embargo, España sigue lastrada por esos estigmas ideológicos y criminales, ellos lo llaman “progresismo”, todo lo contrario, el verdadero progresismo es aquel que avanza hacia más libertad, una sociedad más moderna, más IGUALITARIA, más justa, sin sectarismos ideológicos, todo lo contrario del progresismo del que presume la izquierda, donde discrimina al hombre por el hecho de serlo, separa, divide, destruye los afectos, se alía con todos los que quieren destruir nuestra nación, e incluso, lo dicen abiertamente.
España está atrapada por el socialismo “negrinista”, por un nacionalismo “aranista”, por un comunismo “stalinista” o por un “puyolismo” criminal que, después de casi medio siglo de democracia, siguen siendo sus pilares ideológicos y sus referencias políticas identitarias. España vive en un bucle histórico donde determinados partidos que gobiernan España y las dichosas comunidades autónomas reivindican figuras tan criminales como Negrín, Largo Caballero, Sabino Arana, o el puyolismo del latrocinio sistémico y aberrante, o peor aún, el marxismo o stalinismo asesino que exterminó a más de 120 millones de seres humanos.
Aún hoy día se desconocen las victimas totales, pues siguen existiendo naciones donde el comunismo más incruento sigue matando o encerrando a miles y miles de almas en campos de trabajo o de concentración, incluso de exterminio, como en China, Corea del Norte, Cuba, Venezuela, Nicaragua, Bolivia, Rusia y que, desde hace años, con la complicidad de las grandes fortunas y elites mundiales pretenden imponer al mundo, lo que ellos denominan el nuevo orden mundial, o la agenda 2030.
España está herida, muy herida, desconozco si es de muerte, me gustaría pensar que no, pues viendo a los ciudadanos heroicos votantes o simpatizantes de Vox que han acompañado y compartido la violencia de la campaña en Cataluña, aun albergo esperanzas de una España más justa, unida, sin comunidades autónomas, que nos hacen mucho más desiguales, nos enfrenta, nos divide y nos hace infinitamente peores y por supuesto nos va destruyendo como nación.
Las comunidades autónomas han sido un estrepitoso fracaso y la sociedad española debe de reaccionar, por mucho que cueste. Dejar a miles de “borregos” subvencionados, pagados, viviendo del cuento de la política será muy complicado y hemos de hacerlo todos juntos, pero para ello se necesita el valor y el liderazgo de un partido valiente, que por primera vez en 44 años de democracia asoma como una esperanza para el futuro, Vox.
España es una gran nación y tenemos el deber de imponernos a la voluntad de unos políticos corruptos que se han estado repartiendo a pedazos nuestra patria, pero ahora nos jugamos algo tan importante como la libertad, e incluso mucho más que eso, tal y como va tomando el cariz los acontecimientos, nos jugamos la razón de ser de España. Es una obligación inherente a nuestra españolidad de defender los valores que nos inculcaron y defendieron nuestros ancestros.
Buenas tardes, Fran.
Le escribo las presentes para darle la enhorabuena por este artículo. Me ha gustado. Debo decir que, además de gustarme, coincido plenamente en su tesis y en la oportunidad que nos brinda VOX para hacer las cosas bien de una vez. Justo en las antípodas de como se han hecho hasta ahora.
Un saludo.
Pero, ¿que están haciendo con mi España?, mi españita querida y herida, con lo que luchamos los ceutíes y melillenses por que nuestras ciudades fueran y sean siempre españolas, no lo entiendo, se me saltan las lagrimas, mi enhorabuena, Fran, por tus artículos. Tienes mi apoyo y animo por y para siempre.
Muchas gracias a ambos y a todos los lectires. Os agradezco vuestras palabras.
Seguiremos en la resistencia
Por España, siempre por España
🇪🇸