Nuevo acercamiento de asesinos etarras al País Vasco por parte del gobierno; esta vez el blanqueado es el terrorista José Javier Arizcuren Ruiz, conocido como Kantauri, que ha sido acercado de Murcia a Logroño como una cesión más del PSOE a Bildu para conseguir sacar adelante los Presupuestos del Estado.
Este sujeto fue jefe de los comandos de la banda terrorista durante los 90, concretamente estuvo al frente de los taldes asesinos que la banda distribuía por España a la espera de recibir órdenes para matar objetivos.
El día 7 de febrero de 1996 Fernando Múgica, perteneciente al antiguo PSOE, tenía 62 años y llevaba unos cuantos siendo objetivo de ETA.
Ese día dos terroristas enmascarados -uno de ellos Txapote el criminal que asesinó también a Miguel Ángel Blanco- se acercaron al despacho de abogados donde Múgica y sus tres hijos trabajaban. Mientras se dirigía al aparcamiento junto con su hijo José María, los dos asesinos se acercaron y uno de ellos le descerrajó un tiro en la nuca; su hijo se abalanzó sobre los etarras armados forcejeando e intentando pararles gritando ¡Es mi padre! desesperadamente. Los cobardes le encañonaron con un arma y salieron corriendo, pero José María les persiguió y consiguió identificar el coche de la fuga, un Opel Corsa. Su testimonio fue clave en el juicio.
Es exponencialmente más ruin cuando recordamos que están escupiendo también sobre la tumba de sus propios compañeros de partido.
Otro de los hijos de Múgica, Rubén, ya ha clamado contra el blanqueamiento de la banda terrorista ETA que está llevando a cabo el PSOE para conseguir rédito político:

Kantauri también ordenó asesinar a Alberto Jiménez-Becerril que era concejal del PP en Sevilla y a su mujer Ascensión García. Una noche mientras paseaban de vuelta a casa donde les esperaban sus tres hijos, Mikel Azurmendi alias «Hankas» y Maite Pedrosa Barrenchea, les tirotearon salvajemente.

Estos dos terroristas también han sido trasladados desde Valencia-aunque no a Logroño- para complacer a Bildu por este PSOE, como ya denunció uno de sus hijos contestando al mensaje borrado de un tuitero llamado Gerardo Tecé :
«Te indigna muchísimo que presos condenados por asesinato puedan estar, como el resto de presos, en cárceles cercanas a su familia. Pero te la pela que los asesinados en cunetas sigan ahí y estás ocntento con que nadie pise la cárcel por eso.»

Además del intento de asesinato al Rey emérito, intentó otros ataques contra el Estado pero afortunadamente falló estrepitosamente.
Marlaska va a trasladar a este asesino a la prisión de Logroño con la intención de acercarle al País Vasco -recordemos que los etarras presos han podido recibir visitas durante toda la cuarentena puesto que han permitido excepciones a sus familias- y así cumplir con la agenda política de Bildu en una muestra más de apoyo a ETA.
La excusa para trasladarlo es patéticamente débil; según Prisiones ha mostrado arrepentimiento; el colectivo de víctimas del terrorismo ha recibido este mensaje con indignación.
El PSOE continúa anunciando más acercamientos de asesinos.