El «envenenamiento» y adoctrinamiento sistemático de los medios de comunicación en la sociedad española

Esta es una de las razones fundamentales para entender el estado de idiocia y estulticia de nuestra sociedad. Esto no se podría entender sin observar desde décadas el complejo mundo de los medios de comunicación en España, supeditados en su mayoría a las prebendas gubernamentales. Estos han ido, cada vez más, doblegándose a los intereses espurios y solícitos de los objetivos de los respectivos gobiernos, PSOE, PP, PP, PSOE, monta tanto, tanto monta y por supuesto los nacionalistas, ahora con la careta quitada de secesionistas.

Desde hace varias décadas, prácticamente desde Adolfo Suárez hasta nuestros días, todos los gobiernos se han apoderado de casi la totalidad de la televisión, radios, prensa escrita e incluso, las redes sociales, aunque estas últimas aún resisten el envite del poder. Lo tendrán cada vez más difícil, sobre todo con el nuevo «ministerio de la verdad» aprobado recientemente. Este será el instrumento «ilegal» del gobierno para cerrar medios, cuentas en redes, páginas de todo tipo, como YouTube, blogs particulares y webs molestas, por seguir resistiendo en la defensa de la libertad, publicando noticias que afectan a los comportamientos presuntamente criminales de este gobierno.

Sin una prensa libre, sobre todo las televisiones, pues éstas llegan con mucha fuerza a los ciudadanos y son los medios por los que se informan y crean opinión en una sociedad moderna, no existe el contrapeso regulador de los abusos de poder de los gobiernos. Si, además, éstas tienen un sesgo político, como se lleva haciendo en España durante décadas, llegamos a la conclusión que el «veneno» inoculado durante tantos años, ahora empieza a surtir efecto, con un aborregamiento tan eficaz para los intereses gubernamentales, que esa parte de la sociedad está teledirigida, inducida y manipulada allí donde más le interese al gobierno.

Tan sólo tienen que «machacar» como un martillo pilón las noticias que más le benefician, ocultando o eliminando las que les perjudican en las principales cadenas, la Sexta, la Cuatro, Telecinco, la uno, Antena tres y luego en las autonómicas, también en sus manos, como Telemadrid, que fue regalada por Cifuentes a Podemos por aquello del buenismo absurdo de la derecha acomplejada. Ya lo hizo Aznar y luego Rajoy con el duopolio, que a pesar que el tribunal de la competencia dijo que era ilegal, Aznar no rectificó, sino todo lo contrario.

Pero es que todas las televisiones autonómicas están en manos de los políticos de turno, dependiendo quien gobierne; por ejemplo, en Vascongadas el PNV, todos sabemos lo que pasa con la ETB, o en la Comunidad Valenciana con la copia exacta de la televisión catalana TV3, con idéntico nombre en Valencia.

Y así todas aquellas televisiones de las diferentes comunidades autonómicas en manos de los políticos, todas ellas regadas con dinero público y al servicio, no de los ciudadanos, sino de los intereses propagandísticos del gobierno de turno.

La educación también fue y es semilla de adoctrinamiento

Si a esto le añadimos el sistema educativo español, donde cada autonomía lleva años impartiendo cada uno lo que le viene en gana, con sistemas educativos regionalistas, periféricos y absurdos, sin interés nacional, sin identidad, sin cultura de nación, sin unidad nacional de país etc, nos lleva a recapacitar, primero sobre el estado de las autonomías.

Un pozo sin fondo de gastos superfluos e inadmisibles, de imposible gestión para un país como España. Ya no son 17 autonomías, son 17 mini estados (Reinos de Taifas) insolidarios, anárquicos y corruptos, donde cada cual mira por sus intereses de partido allí donde gobierna, colocando con un nepotismo sin igual a toda la «tropa» posible, primero de sus partidos, luego sus familiares, amigos, conocidos, etc. donde la corrupción es tan vergonzosa que desquicia ver estos comportamientos.

Tenemos ejemplos, como la gestión delictiva del PSOE en Andalucía, la “banda” de los Puyol, en Cataluña, el PNV, en Vascongadas, donde aún se desconoce el paradero de los dos fallecidos en el vertedero de Zaldibar, Joaquín Beltrán y Alberto Sololuze, los dos operarios desaparecidos el pasado 6 de febrero de 2020 y que la televisión de allí silencia.

Por todo ello, los españoles debemos de replantearnos muchas cosas, sobre todo de donde nos informamos, pues aún quedan un puñado de medios libres, que no se han doblegado a la voluntad criminal de un gobierno déspota, sectario y totalitario, que pretende eliminar y aniquilar la democracia, para lo cual necesita quitar de la ecuación el contrapeso de la verdad, la razón del periodismo desde sus orígenes, la razón de su existencia.

La verdad y solo la verdad puede vencer la tiranía del comunismo que ya está a las puertas

Solo un puñado de periodistas libres, que respetan su juramento hipocrático, con una deontología profesional íntegra, podrán vencer toda la corrupción de los medios en España. Ojalá se revierta la situación. Son pocos, muy pocos estos periodistas, pero son infinitamente mejores que sus correligionarios, vendidos al mal y al dinero, y sobre todo, vendidos al poder maléfico y criminal del comunismo, ya casi dentro de nuestras casas, de nuestras vidas. Solo el poder de la verdad de esos valientes comunicadores libres, junto con los ciudadanos que no se conforman con ser domesticados por ese adoctrinamiento brutal, podrán revertir todo el mal vertido durante tantos años a la sociedad española.

Ese es el antídoto para neutralizar el veneno de los medios de desinformación del poder, la verdad, o como dicen en Francia, la vérité.

4 comentarios en «El «envenenamiento» y adoctrinamiento sistemático de los medios de comunicación en la sociedad española»

  1. La TV es un medio divulgativo enorme, llega al público directamente machacándote la mente haciéndote lavado de cerebro . Yo todas esas cadenas que comentas ni las veo, yo intento nutrirme de otros medios. Lo mismo la prensa tanto escrita como digital.
    Me gusta lo que escribes

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