Siempre he dicho que no hay que creer en las casualidades, sino más bien en las “causalidades”. Que lo de Murcia y Madrid, seguido, seguro, por Andalucía es un asalto definitivo para arrancarle el poder a la derecha, o más bien, tener todo el poder omnímodo para perpetrar sus planes y acabar de asaltar el poder sin obstáculos de ningún tipo, cada vez hay menos dudas al respecto y no tiene nada de casualidad.
El gobierno central, hasta ahora tenía obstáculos insalvables para sus proyectos totalitarios, esto queda dirimido con las mociones de censura a las tres comunidades autónomas, Madrid, Murcia y Andalucía que podían hacer frente e impedir ese asalto definitivo del gobierno comunista.
El propósito de la izquierda, evitar las elecciones a toda costa, pues son conocedores de encuestas internas que darían mayoría absoluta al PP y a Vox, que por supuesto pactarían ambos partidos para salvar esas CCAA. Lo de hoy, es una planificación que se lleva pensando desde hace tiempo. Ya se le advertía a Ayuso que convocara elecciones, que había mucho peligro que le interpusieran una moción de censura, pero los casadistas, con Casado y el lanzador de huesos de aceitunas a la cabeza negaban la mayor, incluso, hasta hoy mismo decía Casado que se podría haber negociado con Ciudadanos para que votara a favor del PP en esa moción de censura, haciendo el feo a Ayuso por haber convocado elecciones sin consultarle, sin darse cuenta que lo que pretendía Ciudadanos era lo contrario, gobernar con el Psoe.
Era su “sueño húmedo”. Lo llevamos viendo desde que Arrimadas se arrima su ascua a la sardina de Sánchez. El único que no lo quería ver era el socialista Casado. Bueno, pues ahí lo tienes, a punto de perder el poder en Murcia, Madrid y ya veremos si en Andalucía.
Ahora tocará esperar que decide la justicia y en este tema, habrá que rezar “virgencita, virgencita que me quede como estaba”, pues si dependemos de dar con un juez decente, habrá que, eso, rezar, rezar y seguir rezando y para los no creyentes, que se encomienden a los espíritus del bien para influir que la justicia sea justa y que un buen hombre/mujer juez den la convocatoria de elecciones como legales y vayamos a elecciones en mayo.
De lo contrario, Madrid, Murcia y ya veremos Andalucía, caerá en las garras de la extrema izquierda, que hoy día, es toda la izquierda. Y que Dios nos pille confesados. Entonces el gobierno comunista ya no tendrá ningún impedimento, ningún gobierno autonómico que le toque los cataplines, ni al falsario Cunfraude, ni al vice-moñas/os para acabar de asaltar a latigazos y decretazos las comunidades más prosperas de España en estos momentos.
Por supuesto, seguir o acabar la hoja de ruta de imponer en España una unión de repúblicas socialistas ibéricas. Donde Madrid, Murcia y Andalucía eran claves para impedir ese asalto maldito.
Ahora ya solo queda esperar a que un juez dictamine que hay que ir a elecciones y por lo tanto anular las mociones de censura, o, por el contrario, entregar el poder a la extrema izquierda y suicidarnos económica y políticamente para acabar con todos los avances que esas comunidades han tenido gracias a gobiernos de la derecha. Y lo más grave, dejar el camino expedito a los buitres carroñeros para que acaben de despedazar lo que queda de España.
Gracias por este artículo, Fran.
Estoy de acuerdo, la cosa pinta muy mal. Nada de esto es casualidad y sí algo muy bien organizado. Se ha desatado la guerra y pocos van a sobrevivir. Dios quiera que las mociones fracasen o de lo contrario esto puede acabar muy mal.