El gigante asiático empieza a ver con nerviosismo el envejecimiento de su población y la baja tasa de hijos por mujer.
La Oficina Nacional de Estadísticas de China ha indicado que durante 2020 nacieron 12 millones de personas, un descenso respecto a la cifra- ya de por sí baja- de14,6 millones en 2019.
El Comité Político del Partido Comunista de China ha resaltado que entre los objetivos se su nuevo enfoque natalista figuran «mejorar la estructura poblacional» y «preservar las ventajas en recursos humanos en el país». Asimismo, ha dado a entender que habrá que aplazar la jubilación en los próximos años.