Centenares de efectivos apoyados por siete vehículos pesados y tres helicópteros de extinción siguen trabajando para controlar un incendio que ha arrasado unas 3.500 hectáreas de superficie forestal de Pujerra, Júzcar y Benahavís en Málaga.
Es el cuarto día y ahora mismo se están centrando en eliminar puntos calientes dentro del perímetro, especialmente en la zona norte, que esperan tener bajo control a lo largo de la mañana.
El incendio comenzó el miércoles en el paraje de La Resinera donde también tuvo que intervenir la Unidad Militar de Emergencias y las labores de extinción han continuado sin descanso desde entonces.
Gracias a los casi mil efectivos el viernes a las 9:00 se dio por estabilizado el incendio, aunque desafortunadamente tres bomberos forestales del Plan Infoca han resultaron heridos con quemaduras de diversa consideración. Sólo uno de ellos continúa en el hospital, pero afortunadamente, evoluciona favorablemente.
El fuego ha llevado al desalojo de casi 2.000 personas de cinco núcleos poblacionales distintos que han podido volver a sus hogares tras haberse declarado el nivel 0 de alerta dado que el incendio ya no afecta a núcleos urbanos o a personas.